Después de muchos ensayos y errores, desarrolla en 1950 lo que hoy es un icono del arte industrial francés.Esta lámpara se fija a las exigencias que Jean-Louis buscaba: simpleza, robustez y articulada.
Ante el éxito,en 1953, se crea la empresa dedicada a la comercialización de la hoy llamada Jieldé, en la localidad de Lyon, Francia ; con brazos de hasta 5 extensiones, en zig-zag, de 40 cm. cada uno.Las hay de pie, de techo, para lectura, como aplique ...
Una curiosidad de esta lámpara es que la electricidad es transportada a través de un mecanismo de articulaciones que elimina los cables, debido a la cantidad de accidentes laborales que se dieron en la industria francesa en esa época.